Justicia estadounidense niega fianza a hijo acusado de asesinar a ciudadana costarricense
Un tribunal del condado de Sequatchie en Tennessee denegó el pasado lunes 8 de diciembre la solicitud de fianza a Gabriel Vílchez, ciudadano acusado del homicidio de su madre, la costarricense Silvia Vílchez Mora. Esta decisión judicial refleja la gravedad del caso que ha conmocionado tanto a la comunidad local como a las autoridades consulares costarricenses.
Desarrollo procesal y medidas cautelares
En contraste con la decisión sobre Vílchez, el mismo tribunal estableció una fianza de 250.000 dólares para David Gardiner, esposo de la víctima y coacusado en este proceso penal. Durante la audiencia preliminar, Gardiner negó categóricamente cualquier participación en los hechos criminales.
Las investigaciones policiales han revelado elementos probatorios significativos, incluyendo el hallazgo del teléfono móvil de la víctima sumergido en un estanque ubicado detrás de la residencia familiar.
Marco legal y cargos presentados
Ambos procesados enfrentan cargos de asesinato en primer grado y abuso de cadáver, delitos que en el sistema judicial estadounidense conllevan severas penalidades. La investigación se inició formalmente el 30 de octubre como un caso de persona desaparecida, tras una visita de control realizada por la Oficina del Sheriff del condado.
Las declaraciones contradictorias del acusado Gabriel Vílchez, quien inicialmente afirmó que su madre se encontraba de viaje en Costa Rica, motivaron la obtención de una orden de allanamiento por parte de las autoridades competentes.
Evidencias forenses y confesión
El registro domiciliario reveló una escena criminal extensa, con múltiples manchas hemáticas en alfombras, paredes y mobiliario, así como equipos de limpieza conteniendo restos sanguíneos. Los investigadores localizaron posteriormente restos humanos calcinados en hogueras ubicadas en un área boscosa adyacente a la propiedad.
Durante el interrogatorio formal, Gabriel Vílchez confesó haber agredido fatalmente a su madre utilizando un bate de béisbol, mientras su padrastro observaba la agresión. Posteriormente, ambos procesados habrían trasladado el cuerpo hasta un pozo de fuego donde procedieron a su incineración.
Perspectiva institucional y comunitaria
El sheriff Bill Phillips calificó los hallazgos como "una escena del crimen evidente", enfatizando que la investigación se encuentra en fase inicial debido a la complejidad del caso. Las autoridades mantienen reserva sobre los posibles móviles del crimen mientras continúan recopilando evidencias.
La comunidad local ha expresado conmoción ante estos hechos. Christy Webb, vecina de la familia, manifestó su incredulidad ante la conducta del joven Gabriel, a quien conocía como amigo cercano de su hija.
Este caso subraya la importancia de los mecanismos de protección ciudadana y la cooperación internacional en materia de justicia penal, particularmente cuando involucra a ciudadanos costarricenses en el extranjero.

