114 mipymes costarricenses fortalecen su madurez empresarial y formalización en 2025
El fortalecimiento del tejido empresarial costarricense registra avances significativos. Durante 2025, el Centro Latinoamericano de Innovación y Emprendimiento (Celiem) brindó capacitación y acompañamiento empresarial a 114 micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes) establecidas en el país, las cuales experimentaron un crecimiento destacado en la evolución de sus negocios.
Estas empresas lograron transitar de una etapa de desarrollo inicial hacia una fase de mayor madurez empresarial al finalizar el período de acompañamiento, consolidando así su participación en el ecosistema productivo nacional.
Perfil empresarial y estabilidad en el mercado
Los datos revelan la solidez del programa de fortalecimiento empresarial. El 51% de las mipymes atendidas contaba con más de tres años de operación, lo que refleja que se trata de negocios con estabilidad consolidada en el mercado. Un 19% adicional se ubicaba en el rango de uno a tres años de funcionamiento, evidenciando un enfoque estratégico orientado a fortalecer empresas con potencial de crecimiento demostrado.
El 30% restante correspondió a emprendimientos en etapas tempranas, los cuales fueron orientados específicamente para escalar sus capacidades empresariales y propiciar su posicionamiento competitivo en el mercado.
Modelo integral de acompañamiento
Las 114 mipymes beneficiarias no solo mejoraron su nivel de madurez organizacional, sino que también fortalecieron su gestión empresarial, su posicionamiento competitivo y su inserción efectiva en los mercados. Este progreso se logró mediante el modelo integral implementado a través del Centro de Innovación y Emprendimiento (CIE), operado conjuntamente por Celiem y la Universidad Latina de Costa Rica.
Luis Álvarez, director ejecutivo del Celiem, destacó la importancia de estos resultados: "Los resultados de 2025 nos confirman que el acompañamiento empresarial, expresado en mayor asesoría y asistencia técnica, complementado con capacitación, constituye un recurso valioso para mejorar la competitividad de las mipymes, fortalecer la formalización y orientar adecuadamente la vinculación con recursos financieros".
Transformación en etapas de evolución empresarial
El proceso de acompañamiento generó una transformación significativa en la evolución empresarial de las compañías participantes. Al cierre de 2025, los indicadores muestran cambios estructurales importantes:
- La cantidad de empresas en etapa inicial se redujo en un 67%
- Las empresas en etapa de desarrollo crecieron un 18%
- Las ubicadas en fase de crecimiento aumentaron un 114%
Estos datos constituyen un indicador claro del fortalecimiento estructural y gerencial alcanzado por las mipymes participantes.
Mejoras en gestión interna y planificación
El programa generó avances concretos en la gestión empresarial interna:
- 96% de las empresas finalizaron con un modelo de negocio y propuesta de valor claramente definidos
- 69% desarrollaron un plan de inversión proyectado a 12 meses, fortaleciendo su toma de decisiones financieras
- 66% contó con un plan estratégico básico estructurado
- 62% logró ordenar y clarificar sus estados financieros
- 54% avanzó en la definición de su estrategia de mercadeo
Impacto en generación de empleo
El impacto laboral del programa resulta significativo para la economía nacional. Estas 114 mipymes representaron una fuerza laboral total de 537 puestos de trabajo, distribuidos en 285 empleos directos y aproximadamente 252 empleos indirectos, con un promedio de 2,5 empleos directos y 2,21 indirectos por empresa.
Formalización empresarial
Un aspecto fundamental del fortalecimiento institucional fue el incremento del 26% en la cantidad de mipymes registradas oficialmente ante el Ministerio de Economía, Industria y Comercio (MEIC). Esta formalización promueve el acceso a servicios especializados y una mayor integración al ecosistema productivo nacional, fortaleciendo el Estado de derecho empresarial.
Sectores económicos participantes
Las empresas atendidas representan la diversidad del tejido productivo costarricense:
- Servicios: 35%
- Comercio: 30%
- Agroindustria y sector agrícola: 12%
- Industria: 6%
- Turismo: 5%
- Economía creativa y cultural: 3%
Este programa demuestra el compromiso institucional con el fortalecimiento de la competitividad empresarial y la consolidación de un ecosistema productivo robusto, elementos fundamentales para el desarrollo económico sostenible del país.
